HISTORIA DE VIÑEDOS, VINO Y SINGANI EN BOLIVIA
En los siglos XVI y XVII el vino se consideraba un elemento indispensable en la alimentación para los habitantes del viejo continente.
Por lo tanto, para los españoles y portugueses que llegaban al nuevo continente el vino era imprescindible. Así llevaron el cultivo de la vid a las nuevas tierras colonizadas, asegurando una provisión de vino para sus usos sociales y, más importante, religiosos. No era extraño ver desembarcar frailes acompañados de sarmientos que, al llegar a su destino, plantaban en las misiones que fundaban y desde las cuales imponían religión y costumbres. La vid vinífera, halló un territorio nuevo, de enorme riqueza climática en el que ya vivía una especie próxima en estado silvestre, para desarrollar con pleno potencial su papel en la nueva sociedad. Ciertamente, los frailes comprobaron pronto que con la buena calidad del suelo y el excelente clima de aquella región las viñas prosperaban de forma más que satisfactoria. Animados por sus éxitos, los frailes experimentaron con la cepa silvestre americana y consiguieron crear vides híbridas que producían buena uva y consiguiente buen vino. Se extendió así el cultivo de la vid por tierras americanas a partir de tres núcleos: México, Perú y Brasil, este último con la decisiva intervención portuguesa. En Argentina y Chile la vid se aclimató totalmente. En el polo opuesto, Colombia o Venezuela no se ha visto la expansión de este cultivo hasta principios del siglo XX. Hoy en día se observa ahí el cultivo de uva de mesa bajo condiciones tropicales-secos en un ritmo continuo durante los 12 meses del año; 2 hasta 3 cosechas por año son normales.
BOLIVIA
En nuestro país se cultivan algunos de los viñedos más altos del mundo, de 1800 m (Valle de Tarija y Cañón de los Cintis) hasta 2.850 m (Tojo, Dpto. de Tarija) de altitud. La vid llega a Bolivia en el siglo XVI, procedente del actual Perú, primero a Mizque, luego a los Cintis y Tarija, de cuyo virreinato formaba parte como Alto Perú. Durante siglos, su cultivo ha sufrido vicisitudes políticas, económicas y sociales, sustentándose en una estructura de viñedo familiar. A partir de los años sesenta del siglo pasado adquiere mayor impulso la elaboración de vinos y del destilado autóctono tarijeño, el singani, gracias al esfuerzo de empresarios y agricultores de Tarija, en la región situada en el valle del Guadalquivir y conocida como la Andalucía boliviana. Estos emprendedores apostaron por la importación de tecnología y cepas, que lamentablemente trajeron enfermedades a las vides cultivadas. En el año 1982 el sector vitivinícola boliviano tocó fondo, pero en el año 1986, gracias a los esfuerzos del Gobierno y de otros organismos, se creó el Centro Vitivinícola de Tarija. Los pioneros en la elaboración de vinos y singanis fueron Don Julio Kohlberg (1960) y Don Franz Kuhlmann (1930) respectivamente. Singani es un destilado en base de vino, que en Chile y Perú es conocido como Pisco y en Europa como Coñac y Brandy.
Con asesoría alemana y española, los enólogos bolivianos reconstruyeron el sector vitivinícola. Hoy en día, el valle central de Tarija es el principal productor de uva en Bolivia. La variedad más utilizada es la Moscatel de Alejandría, que concentra casi el 80 % del cultivo de uva blanca. La uva negra más abundante es la Negra Criolla. El cultivo de variedades para elaboración de vinos está en expansión.
Consideran sus expertos que el potencial del sector vitivinícola en nuestro país es sumamente interesante, ya que existe tierra apta para la expansión de los viñedos por lo menos hasta unas 8000 hectáreas. En el momento se puede considerar que la superficie cultivada en todo Bolivia es de 3.500 has, de las cuales 2.500 has se encuentran en el Valle de Tarija. Además se debe mencionar los Cintis en Chuquisaca, Valle de Cotagaita en Potosí, Valle de Luribay en La Paz, Mizque en Cochabamba y Vallegrande en Santa Cruz. En Cochabamba y Santa Cruz lugar se puede observar las primeras bodegas para elaboración de vinos y singanis a partir de los viñedos locales. Desde hace algunos años se vienen preparando viñedos con variedades de mesa en la Provincia Gran Chaco de Tarija, con cosechas a partir de noviembre.
TARIJA
Todas las bodegas tarijeñas ofrecen el vino de mesa que se elabora en base de corte entre Moscatel de Alejandría principalmente para vino blanco y Negra Criolla para vino tinto. En el siguiente cuadro se puede observar que vinos varietales son elaborados en Tarija.
Hace unos 25 años se viene desarrollando la feria anual de la Vendimia Chapaca en Uriondo, capital de 1ª sección de la Provincia Avilés, más conocido como el Valle de Concepción. En este año, el Gobierno Municipal, en conjunto con la Prefectura del Dpto. de Tarija y otras instituciones, pretenden ampliar la tradicional feria de la Vendimia. La XXIII. Versión iniciará sus actividades el 17 de febrero con el I. Encuentro del Arte y del Vino, en el cual participarán renombrados pintores y escultores bolivianos, argentinos y chilenos. El sábado 23 de febrero las Magnificas de Santa Cruz junto con las Divinas de Tarija, mostrarán al público la tradicional pisada de uva. y luego del 24 de febrero la culminación con una feria popular de productores de uva, vinos y singani. El dicho popular “quien vino a Tarija y no tomó vino, ¿a que vino?”, toma fuerza este año e invita a Bolivia entera como también a los amigos de Argentina, Chile y Paraguaya a participar de esta feria autóctona. |
Vinos varietales, bi-varietales(₁) y tri-varietales(₂) de bodegas tarijeñas
Bodega/Vino varietal | La Cabaña (Kohlberg) | Campo de Solana | Aranjuez | Casa Grande | Magnus | La Concepción | Sausini |
Vino Tinto | |||||||
Cabernet Sauvignon | X | X | x | X | |||
Malbec | X | ||||||
Syrah | X | X | |||||
Merlot | X | X | |||||
C.S.-Malbec-Merlot ₂ | X | ||||||
C.S.-Malbec ₁ | X | ||||||
C.S.-Merlot ₁ | X | ||||||
Tannat-Merlot ₁ | X | ||||||
Merlot-Syrah ₁ | X | ||||||
Tempranillo-Garnacha ₁ | x | ||||||
Vino Blanco | |||||||
Chardonnay | X | ||||||
Pinot Blanc | X | ||||||
Riesling | |||||||
Torrentes-Moscatel de Alejandría ₁ | X |
Para la elaboración de singanis se debe mencionar las bodegas Franz Kuhlmann (Los Parrales), La Concepción (Rujero ) y SAIV (Casa Real).
Pionero en la elaboración de vinos varietales fue la bodega COINCA, que en el 1982 comenzó con uva blanca: Moscatel de Alejandría, Torrontés, Pinot Blanc y uva negra: Cabernet Sauvignon, Pinot Noir, Favorita de Díaz y Negra Criolla; algunos de estos fueron embotellados exclusivamente para el Hotel Plaza y el Restaurante La Cacerola en La Paz.
En variedades de uva de mesa predominan las siguientes variedades:
Blanca | Negra | Rosada |
Moscatel Alejandría | Moscatel de Hamburgo | Cardenal |
Italia | Ribier | |
Superb | Red Globe | |
Torrontés | Cereza |
Es muy importante hablar de las bodegas pequeñas, familiares que producen el famoso vino casero o bien vino patero, recordando que para la elaboración de vino en los anteaños la uva fue pisada con los pies. También se encuentra la denominación de vino artesanal. Es urgente legislar esta denominación, ya que bodegas transitorias de pequeña a grande ofrecen vinos artesanales que en realidad ya provienen de un proceso industrial. En vista de que los viñedos de Tarija y del cañón de los Cintis (Dpto. de Chuquisaca) son los más altos del mundo, también el vino merece esta denominación. Falta que el Gobierno Boliviano tramite el derecho de usar “Vinos y Singani de Altura” por un lado y por el otro que el destilado Singani sea un producto autóctono boliviano. La economía de viticultura El año pasado la uva fue comercializada de la siguiente forma. Uva de mesa a razón de 18 $US el quintal; uva de vinificación de 22 $US y para fines de singani (Moscatel de Alejandría) de 14-15 $US por quintal. Uva de mesa de variedades tempranas y tardías obtienen precios de hasta 25 $US el quintal. Todos precios son valores promedios que varían según año de producción y las medidas estatales de impedir la importación descontrolada de uva de los países vecinos. Interrogando a los productores de uva y de vino, ellos manifiestan que nadie se opone a la “importación” de uva y vinos, ya que en realidad es el contrabando que invade con precios desleales y además el estado pierde valores millonarios por no cobrar impuestos. Se puede considerar que la industria de vino y singani comparte con el 50% de viñedos y el saldo se destina a uva de mesa. Las 2.500 has de la viticultura tarijeña en sus tres ramas comerciales, generan anualmente un volumen de 14.500.000,00 $US a nivel agrícola con un incremento anual del 20%. La industrialización de la uva en vino y singani genera un valor agregado de un 30% sobre el precio de transacción. La producción por hectárea es de 350 hasta 500 qq uva de mesa según métodos de conducción y la uva de vinificación produce 250 – 300 qq según variedad. Riesgos de la viticultura La vid es una planta de los climas de invierno frío y veranos cálidos; sin embargo la planta es muy susceptible a heladas tardías que destruyen la floración y pueden causar pérdidas hasta el 90%. Una granizada no sólo destruye los racimos de uva, sino según intensidad causa daños en los sarmientos e inclusive el tronco principal. La parra requiere años para recuperarse; granizadas seguidas tienen por consecuencias un ataque del hongo Phytophotora cactorum que causa la muerte del viñedo. En otros países productores de uva, las compañías de seguro ofrecen un servicio, cuyo costo de prima se incrementa según incidencia climatológico. Cuando las granizadas son anuales, las compañías inclusive rechazan de asegurar este cultivo. Por eso, la Prefectura de Tarija comenzó el año pasado un proyecto compartido con los productores de uva, a cubrir experimentalmente algunos viñedos con malla antigranizo, que garantiza una protección del 100%. Los 3 sistemas de protección son con un costos de fluctúa entre y $US por hectárea y es apoyado en un 50% por la Prefectura de Tarija. La ejecución del proyecto está a cargo de la empresa VITIS.